Las Posiciones Sexuales Favoritas de Los Hombres
Tu sabes realemente cuales son las posiciones sexuales favoritas de los hombres? pues nosotros te decimos.
Existe un monton de posiciones sexuales, y muchas (si no es que todas) son muy buenas.
El perrito
La posición de la mujer "en cuatro patas” lidera el ranking de las favoritas de los varones. “Las posturas que facilitan el orgasmo masculino son todas aquellas donde el hombre tiene el control. Esto incluye la postura del perrito y todas las variantes en las que él te penetre por detrás”, detalla la sexóloga Alessandra Rampolla en su libro Juntos y revueltos, ¿para siempre?
El sometido
El hombre se acuesta boca arriba y la mujer se sienta encima de él, pero dándole la espalda. ¿Por qué les encanta? Porque tienen una visión directa de nuestra cola. Además, para tener contacto visual, nosotras debemos girar la cabeza y asomar la mirada por encima del hombro, algo que les resulta muy sexy.
El misionero
"Es la tradicional, la básica, pero tiene con qué defenderse. Por supuesto, como a todas las cosas,´hay que ponerle onda´, sino puede convertirse en la más aburrida e irritante. Y no vale fingir”, lanza Walter Ghedin, médico psiquiatra y sexólogo, en una nota de Entremujeres. En esta posición la mujer está abajo con las piernas entre abiertas y el hombre se vuelca sobre ella, manteniendo cierta distancia para no volcar todo el peso, quedando cara a cara. La posición le da más libertad en los movimientos al hombre, así que muchas mujeres se preguntan: ¿y yo qué hago? A no frustrarse, hay variantes.
Patita al hombro
“Acostate boca arriba con las piernas abiertas. El hombre pone las manos bajo tus caderas y las levanta para dirigir mejor el pene hacia tu punto G. También él debe abrir las piernas, ya que así no hará presión contra sus testículos. Ahora apoyá tus piernas en los brazos o en los hombros del hombre. Cuanto más alto los subas, más adentro llegará él y más dotado se sentirá”, detalla Emily Dubberley en el libro Solo quiero sexo. “Esta posición ofrece al hombre una gran vista, ya que puede ver con toda claridad lo que está que está ocurriendo, lo que puede aumentar su excitación”, concluye.
El loto
Para practicar esta posición, el hombre debe sentarse arriba de la cama y cruzar las piernas. Vos tenés que sentarte frente a él, encima de sus muslos. Abrazá con tus piernas la cintura de él. ¿Listo? Ahora sí, arriba y abajo, arriba y abajo... ¡Espectacular!
Posturas de pie
Están entre las favoritas de la platea masculina. Suelen ser súper excitantes y los hombres sienten que tienen el control, en especial cuando la mujer está contra una pared. Un agregado interesante es hacerlo cerca de algún espejo vertical, para ver los movimientos de los cuerpos reflejados.
De la cortesana
¡Muy original y satisfactoria! La mujer se sienta sobre una silla o al borde de la cama. El hombre se arrodilla frente a ella y la penetra por delante. ¿Y si la probás esta noche?
La cucharita
La mujer se acuesta de costado, con las rodillas formando un ángulo de 90 grados y el hombre se acuesta de la misma forma detrás de ella. “La penetración puede ser vaginal o anal, según lo disponga la pareja. Si los movimientos son suaves y coordinados, y la penetración lenta y profunda, los cuerpos se fusionan como piezas de rompecabezas. La posición refuerza la fricción del clítoris, reconfortante y gustoso para ella y tremendamente excitante para él”, lanza Mabel Iam en su libro El amante perfecto.
La mujer arriba
Él se acuesta y vos te sentás encima, mirándolo a los ojos. Es la mejor postura para que la mujer alcance el orgasmo, pero también tiene grandes ventajas para ellos. “Para el hombre resulta una buena posición porque puede relajarse y disfrutar por completo del placer generado en su cuerpo y porque provee gran estimulación visual para él, pues está en primera fila para disfrutar del cuerpo desnudo de su pareja”, explica Alessandra Rampolla en su libro Sexo... ¡¿y ahora qué hago?!
Del molino o del helicóptero
¿Te animás a probar algo osado? Seguro que, al menos, lo vas a sorprender. Es así: el hombre se acuesta boca arriba y vos te sentás sobre él. Usando el pene como eje, vos tenés que girar tu cuerpo en 360 grados. Solo para atrevidos.
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